Una
vez mi hijo mayor regaló a mi hija pequeña un ratón del
desierto(creo que se llamaba así).No me hizo mucha gracia
pero.....si el se lo regalaba....si a ella le gustaba......Y ahora
viene lo fuerte...¡¡ que susto nos dimos el día que se le ocurrió
sacarlo de la jaula!!De un salto se escapó de sus manos y de otro
salto estaba en la otra punta de la habitación. ¡No!, ….eso era
demasiado. Que tuviera un ratón...pasaba....pero que ademas saltara
de un lado a otro y no hubiera manera de volver a cogerlo...eso era
otra cosa. Cuando conseguimos atraparlo dije:FUERA.Y adiós ratón
del desierto. No duró mucho en casa......
Hay que amar mucho a los seres vivientes para querer a estos bichossss!!!!
ResponderEliminarsolo por no verle la nariz, los pelos del bigote, el rabo.... ufff No me agradan.
Son muy atrevidos, un día estaba en una casa que había pequeños ratones y venían a los pies cuando mirábamos la tele!! Fuera, les decíamos, no tenían miedo.