Cuando
eramos pequeñas, debajo de los vestidos llevabamos
las enaguas.Todo de algodón.Era un buen trabajo el lavar,almidonar y
planchar la ropa de una familia de seis personas.Una vez, cuando ya
estaba vestida para salir,mi madre me dijo que podía esperar abajo
hasta que mis otras hermanas estuvieran listas.Cuando asi fué y mi
madre me vió casi le da algo: me había metido dentro de un charco,
saltado un poquito, toda salpicada de barro y con una sonrisa de
oreja a oreja.Vuelta a casa y ropa limpia.Puede ser que tambien con
una
en el culete.En realidad me la hubiera merecido.
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