El
primer destino que tuve despues de estudiar
magisterio fué precisamente Torreblanca.Allí los maestros que había
ya estaban de tiempo.Así , como nueva y recien salida del
“huevo,”seleccionaron los niños que iban peor en las dos clases
de primero y me los pasaron a mi.Pero no se dieron cuenta que me
hicieron un regalo porque eran unos niños estupendos y
cariñosos.Como no tenían mas aulas, me pusieron en el pasillo y
separada solo por una cortina.Despues de un tiempo, acondicionaron el
garage de una maestra(que por cierto estaba en la otra punta del
pueblo)y allí nos fuimos,los niños y yo.¡Estupendo!Una
clase para mi sola.En aquella época , mi nómina era de 11.000
pesetas al mes.Con mi primer sueldo en la mano fuí a mis padres y
les di 10.000 pesetas y me quedé 1000.¡Que orgullosos
estuvieron!.....¡.y yo tambien!
Que bonito gesto, dice mucho de tí. Todos estabamos muy orgullosos de ti. Eras muy buena, trabajadora y lista. En clase todas las alumnas aprendieron a estudiar y a saber apreciar tu trabajo. Los maestros ya no enseñan para que aprendan los alumnos sino para terminar el libro......
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